estoy por casarme con Árbol de mango, el Bosque Mesófilo de Montaña y la Selva de los Tuxtlas. llevo año y medio planeando estas bodas. este sábado 18 de noviembre llegó el encuentro con Bosque Mesófilo.
tengo varios padrinos y madrinas.. y los que se vayan sumando

guillermo boehler, padrino de brindis
fernándo velázquez, padrino de foto y decoración del pastel y el viento
lucía aiello, madrina de anillo y foto
noemi orozco, madrina de lazo
carolina gómez, madrina de vestido
edgar portillo, amigo de caminatas de selva y padrino de video
jimena ortiz, jueza, sacerdotiza y notaria
padrino de pastel, Abraham Toriz

Acá las palabras del brindis

Erendira y el bosque,

Esta es la primera boda en que participo en mi adultez,
Yo no conozco tanto al bosque,
A Erendira solo un poco más

Me cuesta articular las palabras para esta unión
Pero hay algo aquí, es lo que puedo decir,
hay algo alegre, una potencia.

no conozco al bosque, no como me gustaría
¿nombres técnicos?
no me acuerdo de su apellido (¿cómo era?)
¡Mesófilo!
¿Cuál es el nombre de todes aquelles seres que son este matrimonio?
¿zorros? ¿tlacuaches? ¿gusanos? ¿grillos? moscas?¿hongos?
¿quienes más?
¿habrán disfrutado el pastel?

Ahora, que están unidos, Mesófilo y Ere, ¿cómo hablaremos de elles?
Esto no es heteronormativo, esto no es antropocenico, no hay posesión, no hay deuda, por eso esta pregunta es tan importante, ya no es un “yo”, ya no es el bosque y la Erendira, es otra cosa, una cosa que ya sucedía –simbiosis–, el bosque sin Erendira no es el mismo, igual que Erendira sin el bosque. No es una cuestión romántica o posesiva, el bosque seguirá siendo bosque sin ella, ella seguirá siendo Erendira sin el bosque, no hay relación de falta, hay producción de diferencias, una reescritura interpersonal entre experiencias.

Esto es un discurso para una boda, no me pondré denso y teórico,
solo quiero que consideren
el olor que anuncia la lluvia
el calor del sol cuando toca la piel en un dia frio
el sueño cuando empieza anochecer
el olor dulce de alguna flor
el olor agrio de la carne que se pudre
el sabor de la sal en la piel
el lado frío de una piedra
la humedad de Xalapa en el pelo
la parte mojada del musgo
lo jugoso de la mordida a un mango
la picazón de la mordida de un mosquito
son partes nuestras, nos afectan, las recibimos,
No existen palabras para lo que siente un bosque cuando entramos en él,
ojalá pudiéramos escuchar lo que dicen entre ellos
mientras comparten su experiencia,
me da miedo su opinión sobre les humanes.

nosotros solo sentimos los síntomas que resultan de nuestros encuentros con él.

La relación de Ere no empieza aquí, en esta ceremonia, este ritual de unión, comunión, de hacerse uno, sin la individuación de cada cual.
El acto de Ere con Mesófilo es confirmación del vínculo,
es transición, es entregarse a esta relación, esta producción de lo impersonal, dejar el “yo” e invitarnos a todes que experimentamos con ella este momento,
a involucrarnos en una posición política y estética,
repensar la lejanía, la pulcritud y la seguridad del arte contemporáneo y de la academia con el mundo,
estar cerca, ensuciarnos, participar, comprometernos para hacer vidas distintas.

yo no tengo que desearles felicidad, porque ya son alegres
yo no tengo porque darles un regalo, porque no les falta nada
yo no tengo con que disimular mi emoción,
para decir que me entra al pecho Erendira/Mesófilo,
en una respiración
como Erendira entra al bosque,
como el bosque entra a Erendira.

Salud,
guillermo boehler
¿dónde termina el bosque?


esta pieza es de todxs los asistentxs y padrinxs, madrinxs y en conjunto podremos decidir qué hacer con ella.


aprender a tomar decisiones en conjunto, para el bien común. como lo hace bosque.

una micropolítica pequeña, apenas visible.

notaria de la pieza: jimena ortiz
este es un texto que hice el año pasado, donde hablo de los nervios que tengo (puedes hacer click en este cuadrito).
¡¡¡llevo regalándome al bosque los nutrientes de mi cabello por cuatro temporadas, inviernos, primavera, verano y otoño!!

Voy descubriendo varios caminos para dialogar con elle. Hundirme en biomaterial es unx. 
mi boda con Bosque Mesofilo está inspirada en las bodas y el pensamiento ecosexual de annie sprinkle, que se ha casado con varios ecosistemas terrestres en bodas "site specific". Esta es su manera de mostrar la capacidad de agencia de estos territorios a través de la realización de dichas uniones. En 2008, se casaron con Tierra en una boda artística que abrió el camino para explorar el reino de la ecosexualidad, tomando a la tierra como su amante y haciendo de su placer mutuo, una expresión encarnada de pasión por la naturaleza. desde entonces, no solo han estado empujando sino borrando los límites que circunscriben la biología y la ecología, creando arte ecosexual en su desempeño de un ambientalismo que es feminista, queer, sensual, sexual, posthumano, materialista y lleno de humor. al igual que Annie me maravilla la flor de un cerezo. - Las flores son los genitales de los árboles-. por lo que los casamientos con los ecosistemas nos lleva siempre a dar paseos por la naturaleza ecosexual.
mi axis mundi es el bosque y la miel
Lxs monxs aulladxres expresan el deseo con la lengua, realizando lengüeteos

1,2,3,4,5,6,7,8,9,10
el cabello como una tecnología para llevar a cabo los diálogos con Bosque
han surgido muchas pregutas cuando cuento mis planes de boda, cómo sabes que te dijo que sí, cuando se lo pidieron, qué pasará la noche de bodas, risas, felicitaciones.

ha sido un gran goce compartir esta alegría con mis amigos y familia.

el hueso del mango es un gran elemento para la noche de bodas, alguien me dijo.
Conté en un conservatorio que me casaba con el bosque y les dio risa, yo lo que quería era que me felicitaran.
unos poemas para la velada

Mi alma es un vampiro grueso, granate, aterciopelado. Se
alimenta de muchas especies y de sólo una. Las busca en la
noche, la encuentra, y se la bebe, gota a gota, rubí por rubí.
Mi alma tiene miedo y tiene audacia. Es una muñeca grande,
con rizos, vestido celeste.
Un picaflor le trabaja el sexo.
Ella brama y llora.
Y el pájaro no se detiene.

Esta es una pieza tiene un carácter colectivo, por lo que todxs podremos hacer uso del material que de ella se deriba y que está formada por diferentes objetos, videos, fotografías, actas y documentos que reconocen la unión de Eugenia Eréndira Gómez Espinosa con Bosque Mesófilo de Montaña.
Tanto el capital simbólico, económico y objetual de la pieza es una construcción colectiva que toma en cuenta a todxs lxs artistas involucrados en la realización de este evento, así como a los asistente a este. El material estará disponible y libre para su descarga en la carpeta:
https://drive.google.com/drive/folders/1XJysXEUtJ2-uNiL-oYQdi-FQNmJi7I3j?usp=sharing

Al firmar esta acta, ustedes confirman estar de acuerdo en participar y serán integrados a una lista de correos. Ya que al ser una pieza colaborativa, todxs los participantes tendrán la agencia de decidir qué hacer con el capital económico que esta pieza genere y poder proporcionar ideas y propuestas para llevar a cabo labores de cuidados que Bosque Mesófilo de Montaña necesite o en los los temas de interés correspondientes en la asamblea alrededor de esta pieza.

Nombre_____________________ Firma_________ Correo____________________
Nombre_____________________ Firma_________ Correo____________________


Pueden mandar un correo a eerendiragomez@gmail.com si quieren ser integrados a la lista de correos.



Ella busca y encuentra
Verdes hojas
Descubre amenaza rojiza
Cuál filetero, él, arranca un pedazo de bistec
Verde
Lo carga con rumbo desconocido
Ella como Poirot lo persigue
Es un descuartizador, piensa
No es uno solo, son cientos
Buscan un refugio escondido
Cuáles ladrones que se sienten descubiertos
Piensa, cruel naturaleza
Hacerle esto a tan indefenso ser
Al tiempo ella descubrirá
Que habrá otros que harán lo mismo
Concluirá qué en la naturaleza
No existen ni buenos ni malos
Buscará otros patios para entender
El funcionamiento de esa red
Viajará mucho para descubrir
Leerá constantemente para comprender
Y así las cosas
Eternas búsquedas
Constantes encuentros
Insaciables preguntas
Nuevos saberes
Ahora ella entiende cómo funciona
El reloj de la naturaleza